La demanda es parte fundamental para el ejercicio de nuestra profesión, pues es la columna vertebral del Derecho, sin embargo, existen otras figuras jurídicas que son elementales para el abogado, en un caso concreto nos encontramos con la contraparte de la demanda: la contestación de la misma. Es por esta razón que en esta edición de Redacción Jurista abordaremos consejos sencillos para poder ejercer la excepción y redactar de la mejor manera una contestación.
Todo proceso jurisdiccional inicia con el ejercicio de la acción, es decir, con la presentación de una demanda, y como se mencionó anteriormente, toda acción lleva en coexistencia la figura jurídica de la excepción la cual, según José Ovalle Favela, se entiende como el derecho subjetivo procesal que tiene el demandado para contradecir u oponerse a la acción o a la pretensión hechas valer por la parte actora (Ovalle Favela, 2016).
En este sentido afirmamos que si bien la acción y la excepción son figuras similares, en realidad tienen un contenido completamente distinto, ya que con el ejercicio de ésta última la parte demandada opone cuestiones contrarias a las pretensiones de la contraparte. Dicho lo anterior, procedemos a delimitar los elementos que conforman este documento.
Primeramente, es necesario recordar que dependiendo de la materia en que nos encontremos, será el término para dar contestación a una demanda.
Ahora bien, una contestación debe iniciar de manera similar a una demanda, es decir, dentro del proemio deben de incluirse los datos siguientes:
Tribunal o autoridad a quien va dirigida.
Número y tipo de procedimiento.
Generales del demandado.
Posterior a esto, se procede a dar contestación a los hechos señalados en la demanda; esto debe hacerse relacionando cada contestación a un hecho, es decir, se debe seguir el mismo orden que en el escrito inicial y dar precisa respuesta a cada uno de ellos, ya sea afirmando o negándolos. En caso de existir prestaciones (como en una demanda laboral), se deberá seguir el mismo proceso, negando o aceptando dichas prestaciones.
Como tercera parte se encuentran los fundamentos de Derecho, que comprende los ordenamientos jurídicos en los cuales vamos a basar nuestra contestación.
Posterior al apartado de Derecho se encuentra el de las excepciones y defensas, que es en donde se expondrán aquellos puntos que consideremos favorables y en los cuales nos basamos para dar contestación.
Finalmente, se concluye con los puntos petitorios en los cuales solicitamos, primeramente, se tenga por admitida la contestación y se de resolución favorable a la misma.
Juristas, esperamos este artículo sea de su agrado y contribuya a la formación profesional de todos los abogados y estudiantes de derecho que siguen nuestra página. Agradecemos sus comentarios y sugerencias para crecer y mejorar dentro de la comunidad de Estilo Jurista.
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